Sueños

Los sueños son eso, soeños, simples fantasías, simples añoranzas de nuestro subcosciente, a veces son malos, a veces es mejor no soñarlos, pero son tan hermosos, tan esperados que es imposible no desearlos, a veces son buenos, tan buenos que empezamos a soñarlos muy frecuentemente, tan constantemente que olvidamos vivir,, a veces son reales, tanto que parecen realidad, una realidad tan hermosa, pero a la ves tan falsa.

Ahora pienso y pienso, que en mis sueños he vivido, y que toda mi vida he soñado, he soñado tanto que mi vida se ha vuelto un sueño, un sueño largo, un sueño hermoso, un sueño que poco a poco se ha vuelto pesadilla, y hoy más que nunca quiero despertar.

Siguiendo mi teoría, me doy cuenta que toda mi vida he vivido en mis fantasías, en añoranzas falsas, en tristes esperanzas del alma, vivido y vivido en un eterno sueño, un sueño interminable del que no puedo despertar, siempre esperando, siempre amando, siempre soñando...

Y dentro de mi sueño sigo soñando, y entonces me doy cuenta que vivo en el sueño de mis sueños, pero entonces debo despertar del más profundo y luego del otro. ¿pero y si no? ¿si todo fuera real? ¿si todo fuera vida y no sueño?, no se, no entiendo, lo único que puedo decir, es que hoy sigo soñando.

la historia que no existió.

Me gustaría contarte una historia, una historia que jamás existió, en ella te veo a tí, tal cual eres, con tu sonrisa, esa que le regalas a él todos los días, con tus tiernos abrazos, esos que le entregas como si no fueran nada y con tus besos, los que nunca me darás, los que deseo más que nada, los que caen estrepitosamente de sus labios.

Me gustaría contarte una historia, una historia de un amor irrefrenable, una historia de un amor verdadero, una historia realmente hermosa, una historia que nunca existió...

Me gustaría que escucharas emocionada esta historia, que creyeras en ella, quiero que la sientas y tal vez te animes a vivirla, a vivirla junto a mi, un ángel con un corazón perdido y con un alma desolada. una ángel caído, un ángel perdido...

Y por sobre todo amaría que escucharas esta historia, ya que jamás la viviremos juntos, ya que jamás ma darás tus sonrisas, ni tus abrazos, ni tus besos.

Me gustaría que al menos soñaras esta historia, aunque sea por un segundo, que la sintieras hasta el lugar más oculto de tu ser, y así almenos tener el consuelo de que por un momento me viste junto a tí, justamente como siempre lo he soñado, viviendo nuestra historia.